Desde la concepción de un laboratorio de luz, el trabajo de Lidia Benavides (Madrid, 1971) mantiene una persistente indagación lumínica en sus distintos factores plásticos y conceptuales como fisicidad en la construcción, trasparencia, vibración, temporalidad; emotividad en el distanciamiento, la paradoja o extrañeza; y su trascendencia en un estado semiinconsciente, de virtualidad, transfiguración y sinestesia. De 2004 es la serie Nero, esculturas incandescentes casi en blanco y negro. Sus fotografías y cajas de luz de la serie Ventura, fueron presentadas por Estiarte en ARCO05.
